Allí la Hermana Mayor acompañada del Alcalde de la localidad Diego Lorenzo Becerril, y el concejal del Partido Popular Juan Manuel Porras y el párroco José Ramón Verea, lanzó unos emotivos VIVAS a la patrona de Beas.
Emotivo también fue cuando los bueyes se arrodillaron a las puertas de la ermita, rindiendo así pleitesía a la Virgen de Clarines, y provocando el aplauso de los beasinos y clarineros que llenaban la ermita de Clarinera.
Minutos más tarde se ponían frente a frente el Simpecado y la Virgen de Clarines, entre lágrimas , aplausos y vivas.
La Salve puso fin a este Camino de Clarines Chico en su cincuenta aniversario.