La quinta 2020 sigue con su «racha de buenos actos». Después de plantar un árbol en el parque municipal el pasado fin de semana, ha querido visitar a los ancianos que se encuentran en la residencia. La visita tuvo lugar ayer, viernes, a las 17:15 h y se prolongó hasta pasadas las 19:00 h. Los chicos y chicas de esta quinta, que cumplirán la mayoría de edad en este año, saludaron a los mayores y cantaron algunas canciones típicas de esta tradición, a excepción del estribillo, que consideraron inoportuno por respeto a los ancianos. Después, se fotografiaron junto a ellos y junto a los trabajadores y directora de este centro, que les tenían preparados un aperitivo.
Esta quinta quiere desprenderse de la fama de «gamberra» que ha ido adquiriendo a lo largo de los años organizando actos simbólicos como los de estos dos últimos fines de semana.
Recordamos que la tradición de los quintos data de hace varias décadas. Se trataba de celebrar la despedida a los jóvenes que iban a prestar el servicio militar, «los quintos». Posteriormente, se han ido incorporando las chicas, con el nombre de «quintas».
Esta tradición sigue viva en muy pocos lugares de la geografía española, siendo Beas uno de los pocos sitios donde se conserva. Desde hace muchos años, los quintos de Beas pasean cada fin de semana de febrero con sus «palillos» compuestos por moñas con los colores de la bandera de España, salvo el más pequeño de la quinta, que lleva las moñas con los colores de la bandera andaluza. Durante estos paseos por el pueblo, van cantando canciones dedicadas a cada uno de los chicos de la quinta. Esta celebración termina con la romería de Clarines Chico, último fin de semana de febrero.
Rocío Cruz.