Preciosa estampa la que se ha visto en el dique de Beas después de las aguas caídas en estos días en nuestra localidad. Los 57,3 litros del pasado jueves , unidos a los 21,5 l. del viernes, 0.2 litros el sábado y en el día de hoy aún la tenemos por contabilizar, han llenado por completo la presa de Beas.
Pero esto puede parecernos engañoso por un lado ya que nuestro dique es de poca capacidad (3 hm3) si lo comparamos con otros de la provincia que llegan casi a 500 hm3, pero no deja de ser una bendición que veamos estampas tan bonitas como un dique con su capacidad al completo de agua.
EL DIQUE DE BEAS
El embalse fue construido sobre el arroyo del Castaño. La superficie de la presa es de 36 hectáreas y la capacidad de 3 hm3. La presa la encargó el Ayuntamiento de Huelva en 1911 para suministrar agua a la capital. El pantano o dique de Beas, como popularmente se hizo común, pronto se vio insuficiente para satisfacer las demandas urbanas, acrecentadas con la llegada del Polo en el año 64. Se encuentra en el arroyo Castaño, afluente del río Candón, situada entre los términos municipales de Beas y Niebla, en las primeras estribaciones de Sierra Morena. La Presa de Beas aporta un agua de gran calidad a Huelva capital y su área de influencia. Para ello, un canal de distribución, de unos 30 kilómetros de longitud, manda el agua hasta la estación potabilizadora de El Conquero, en Huelva. Una presa que se considera que aporta agua de gran calidad, puesto que, al ser un embalse de capacidad limitada -su volumen del embalse es de 3,30 Hm3-, suele llenarse y vaciarse varias veces al año.
