
Psicología en Casa
por Marina Gómez
Consejos para padres con hijos que tienen ansiedad
“mi hijo se preocupa por cualquier cosa” “no puede oír nada de enfermedades porque se cree que nos va a pasar a todos” “vomita casi todas las mañanas antes de ir al cole” “está irritable y enfadado siempre” “cuando tiene exámenes en el cole, no puede ni dormir” “en casa no va al baño solo, hay que acompañarlo”” las escaleras de casa las sube y las baja corriendo muerto de miedo”
Muchos padres bienintencionados tratan de proteger a sus hijos que padecen de ansiedad de sus temores, sin embargo, sobreprotegerlos puede empeorarla. Incluso llegar a reforzarla. A continuación, os cuento algunos consejos para ayudar a vuestros hijos a controlar su ansiedad sin reforzarla.
1. No trates de eliminar la ansiedad, ayuda a tu hijo a controlarla.
La mejor manera de ayudar a los niños a superar su ansiedad es ayudarles a aprender a tolerarla lo mejor que puedan. Con el tiempo, la ansiedad irá disminuyendo.
2. No evites ciertas cosas simplemente porque le causan ansiedad al niño.
Ayudar a los niños a evitar las cosas que les dan miedo hará que se sientan mejor a corto plazo, pero a costa de reforzar su ansiedad a largo plazo.
3.Sé positivo, pero realista.
No prometas a tu hija que lo que teme no va a suceder, por ejemplo, que sabes que no va a tener problemas en aprobar el examen, en su lugar muestre confianza en que pase lo que pase, lo superará.
4. Respeta sus sentimientos, pero no los refuerces.
Dar validez a los sentimientos no es igual que estar conforme con ellos. De manera que, si a tu hija le aterra ir al médico, escucha y sea empático, pero anímela a hacer frente a sus temores.
5. No le hagas preguntas que sugieran una respuesta.
Anima a tu hijo a hablar de sus sentimientos, pero evita hacer preguntas que sugieran una respuesta. Por ejemplo, en lugar de preguntarle: “¿Estás preocupado por este examen tan importante?”, hazle una pregunta más abierta como “¿con ganas de que pase el examen, como lo llevas?”.
6. No refuerces los temores de tu hijo.
Evita reforzar sus temores con el tono de tu voz o el lenguaje corporal.
7. Dale ánimos.
Dile que aprecias el gran esfuerzo que está haciendo, y recuérdale que cuanto más tolere la ansiedad, más disminuirá.
8. Intenta que el periodo previo a la situación estresante sea breve.
Cuando tememos hacer algo, el periodo más duro es antes de hacerlo. Así que, si a un niño le pone nervioso ir al médico, no hables del asunto hasta que sea necesario.
9. Planéalo detenidamente con tu hija.
En ocasiones puede ser conveniente hablar con ella sobre lo que sucedería si sus miedos se hicieran realidad. ¿Cómo lo manejaría? Para algunos niños, disponer de un plan puede ser una forma saludable y eficaz de reducir la incertidumbre.
10. Da ejemplo de cómo controlar la ansiedad de forma sana.
No finjas que no experimentas estrés ni ansiedad, al contrario, permita que los niños vean que sabes controlarla, tolerarla, y se ve capaz de superarla con tranquilidad.